

La tarta de zanahorias pertenece al recetario de mi madre, La cocina de Mari, y la recuerdo de siempre. De pequeña no me gustaba mucho, por el coco rallado, pero poco a poco le fui cogiendo el gusto, además es muy fácil y rápida de preparar. Así que la he hecho mucho, aunque últimamente la tenía olvidada.
He modificado un poco las cantidades, porque un vaso y medio de azúcar me parece más que excesivo, con medio vaso es suficiente. De zumo de naranja, he añadido medio vaso, para que esté más jugosa.
Los bollos los he preparado en casa, pero se pueden utilizar unos buenos de pastelería.
La medida de «vaso», es el clásico vaso de agua de 1/4 de litro.
Ingredientes:
- Seis bollos suizos.
- Vaso y medio de coco rallado.
- Medio vaso de azúcar.
- Vaso y medio de zumo de naranja.
- Medio kg de zanahorias o un poco más.
Preparación:
- Comenzamos por cocer las zanahorias, peladas y cortadas en trozos. Cuando estén tiernas las quitamos bien el agua y las machacamos, con un prensa patatas por ejemplo, es mejor que triturarlas con la batidora.
- Las ponemos en un cuenco. Añadimos el zumo de naranja, casi todo el coco rallado, reservamos un poco para adornar la tarta, y el azúcar. Mezclamos bien y reservamos.
- Forramos un molde, no muy grande (22-24 cm), con film de cocina. Abrimos los bollos en dos, colocamos una de las mitades, la superior mejor, en el fondo del molde, recubriéndolo bien. Vertemos la mezcla de zanahorias y la cubrimos con las otras mitades de los bollos. Presionamos bien con un plato o una tapa que encaje en el molde. Por encima, ponemos peso. Guardamos la tarta en la nevera. Con una noche es suficiente.
- A la hora de servir, desmoldamos la tarta en una bandeja, dándole la vuelta, y recubrimos bien con el coco rallado que hemos reservado.
- Lista para comer.
A disfrutar.